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Visita a las obras de la nueva escoleta infantil de Sant Rafel

16·07·2024
  • Obras Públicas
 Imagen Visita a las obras de la nueva escoleta infantil de Sant Rafel

La previsión es que se pueda poner en marcha en el curso 2025-2026.

El alcalde de Sant Antoni de Portmany, Marcos Serra; la concejala de Obras Públicas e Infraestructuras, Neus Mateu; la concejala de Educación, Eva Prats; el concejal de zona de Sant Rafel, Marcos Roig, y el director territorial de Educación de Eivissa y Formentera, Juan Álvarez, han visitado esta mañana, junto a técnicos del Ayuntamiento y representantes del proyecto y de la empresa constructora, las obras de la nueva escoleta de educación infantil que se está construyendo en Sant Rafel.
El nuevo centro, con un plazo de ejecución de seis meses y tres de certificación final de obra, se inició en el mes de abril con los trabajos de demolición y tiene prevista su finalización a finales de año.

El alcalde Marcos Serra ha destacado la importancia de este centro educativo para atender la demanda de 0-3 años. “Es un proyecto muy necesario y positivo para Sant Rafel y para el municipio, ya que actualmente el Ayuntamiento cuenta con una única escoleta municipal, en Can Coix, que se complementa con la de ses Païsses, gestionada por el Consell”, ha manifestado Serra, que ha anunciado que “las obras van en el plazo establecido y el objetivo es que se pueda licitar la gestión para ponerla en marcha de cara al próximo curso escolar 2025-2026”.

El alcalde ha recordado que se decidió hacer esta segunda escoleta municipal en Sant Rafel, en una zona frente al CEIP Sant Rafel, marcada en el planeamiento como zona educativa. Del proyecto, ha destacado las características de sostenibilidad que reúne el edificio.

Por su parte, Neus Mateu ha explicado que “es una de las obras más importantes de la legislatura, una edificación moderna, innovadora y con sellos de sostenibilidad, que nos permite colaborar con el medioambiente, a la vez que los niños pueden disfrutar de unas instalaciones muy cómodas y prácticas”. Además, ha detallado que el proyecto se ha coordinado con el departamento Educación y se han atendido las propuestas y necesidades de la comunidad educativa para incluirlos en el proyecto, consiguiendo una edificación “muy funcional”.
El director territorial de Educación, se ha mostrado “muy contento” por la construcción de esta escoleta, ya que “se necesitan plazas de 0-3 años” en la isla. “Estamos solicitando más centros de infantil porque tenemos una demanda muy alta, por lo que es muy importante este centro”, ha manifestado.

Proyecto

La escoleta, ubicada en una parcela de 609 metros cuadrados en la calle d’en Toni des Pou, frente al CEIP Sant Rafel, contará con 67 plazas de 0 a 3 años. La edificación proyectada, de 517 m², está distribuida en dos plantas y dispone de cinco aulas (una de 0-1 años, dos de 1-2 años y dos de 2-3 años). De las 67 plazas, siete se destinan a bebés de 0-1 años, 24 plazas al segundo curso de infantil y 36 plazas al último curso de infantil. En la planta baja se sitúan las tres aulas de los más pequeños y en la primera planta se ubican las dos aulas de 2-3 años, disponiendo todas ellas de acceso directo al exterior con zona de recreo tanto cubierta como abierta.

Las obras, adjudicadas por un importe de 1.520.780,54 euros a la UTE Essex-Insae, cuentan con una subvención de 844.200 euros proveniente de las ayudas para la creación y consolidación de plazas públicas de primer ciclo de educación infantil convocadas por la Conselleria d’Educació i Universitats del Govern balear, un programa que está financiado por el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes y por la Unión Europea Next Generation EU, en el marco del mecanismo del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Por su parte, el Ayuntamiento de Sant Antoni aporta una inversión de 676.580,54 euros.

En cuanto al proyecto básico, proyecto de ejecución y dirección de obra, contratada por el Ayuntamiento, se adjudicó a la empresa Studio+ por 78.144,87 euros.

Certiticación verde edificio sostenible

En cuanto a la dotación de las instalaciones, el proyecto apuesta por las últimas tecnologías en eficiencia energética, lo que le permitirá obtener el certificado verde de edificio sostenible con sello de 3 hojas. En concreto, se contempla una instalación fotovoltaica compuesta por 35 paneles solares a ubicar en la cubierta del edificio, consiguiendo una potencia máxima de 18,7 kW, un sistema de aerotermia para la obtención de agua caliente y calefacción, sistema de suelo radiante, climatización de alta eficiencia con sistemas de última generación y control de los recuperadores de calor encargados de la ventilación del edificio mediante sensores de CO2 y controladores de iluminación automática variable.

Previamente al inicio de la construcción del nuevo centro, se llevó a cabo un proyecto de demolición del muro de parcela y la edificación antigua existente de unos 80 m2 destinada a almacenamiento.